En lo que va del 2022, han asesinado al menos a 130 policías en el país, más de uno al día. Los estados que registran más muertes son: Zacatecas con veintiuno, Guanajuato con dieciséis, Veracruz con doce, Michoacán con diez y Sonora con nueve.

Inició su registro oficial en 2018

La generación de estos datos, son gracias a que desde 2018, se empezó a registrar y a obtener un conteo a través de fuentes hemerográficas y solicitudes de información por parte de organizaciones civiles. Este indicador también coincide con la tasa de homicidios dolosos, pues estas entidades se ubican dentro de las siete con más homicidios en los primeros meses de 2022.

Uno de cada dos son policías municipales

En esta administración federal, desde el 1º de diciembre de 2018, se lleva un registro de más de 1,500 policías asesinados. Se estima que 1 de cada 2 muertes, se trata de policías municipales, el 40% se trata de policías estatales y el resto de policías del ámbito federal. Ciertamente, es más común que los uniformados sufran ataques, principalmente cuando se encuentran francos, que sucede en casi el 30% de los casos.

Más riesgo que un ciudadano común

La tasa de homicidios dolosos por cada cien mil habitantes en el país cerró en 2021 con 23 casos, mientras que la tasa de policías asesinados por cada cien mil policías fue de 150, es decir, seis veces más. Esto significa que ser policía en este país tiene 6 veces más probabilidades de ser asesinado que un ciudadano común.

Baja remuneración

Es importante advertir que, en varios estudios realizados para tratar de entender esta situación, prevalece una baja remuneración en las policías, mala capacitación y escaso equipamiento. Las policías trabajan jornadas extenuantes y no han sido una prioridad al momento de distribuir el presupuesto.

Malos elementos

También es un hecho que existan los malos elementos, aquellos que se oponen a la subordinación y que en ocasiones los orillan a vivir infringiendo las normas y la propia ley que deben vigilar, observar y hacer cumplir.

Insistir en una reforma policial

A la sociedad en general no les genera confianza la policía y perciben en ellos un mal desempeño. Hay que insistir en la reforma policial, que esté enfocada en recuperar su carácter civil, democrática y con visión local. Las policías en México necesitan tres cosas básicas: capacitación, certificación y modernización.